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Como parte del propósito de apostar por una regeneración sostenible, ACCIONA Energía ejecutó un proyecto de “restauración socioecológica”, consistente en la plantación de 1.200 especies nativas en un corredor ecológico, en la comuna de Puente Alto, en Santiago de Chile.
La actividad se realizó de manera colaborativa entre trabajadores de la compañía y sus familias, con la comunidad vecina de Puente Alto, y la asesoría técnica de la consultora Symbiótica Bosquicultores. Durante toda una jornada, cerca de 150 personas trabajaron para crear una isla nativa de 500 metros cuadrados, bajo el novedoso método japonés, Miyawaki, que propicia la generación de bosques urbanos de crecimiento acelerado.
Para el Gerente de QSES de ACCIONA Energía, Xavier Rojas, una de las claves para el éxito de este programa es el trabajo colaborativo que se ha gestado en torno a la iniciativa. “Si queremos recuperar nuestro plantea, tenemos que hacerlo en terreno, vinculándonos con las comunidades vecinas y comprometiendo a las nuevas generaciones, quienes serán los encargados de resguardar que las especies plantadas, en el mediano y largo plazo, se conviertan en un bosque urbano”, señaló el ejecutivo.
Restaurar y propiciar la generación de bosques urbanos es esenciales para mejorar la calidad de vida de las personas y crear ciudades más resilientes, explicó Claudia Poblete, Subgerenta de Medio Ambiente de ACCIONA Energía. destacó la participación y compromiso de los asistentes a la actividad. “Hemos plantado árboles nativos, como el Quillay y el Espino, con la participación de niños y niñas y también de adultos mayores. Para nosotros es emocionante que esta actividad sea educativa para toda la gente del sector, ya que ese es el camino para proteger los espacios verdes”, indicó.
Globalmente, ACCIONA ha establecido en el Plan Director de Sostenibilidad plantar 1 millón de árboles en zonas con degradación ambiental durante el período 2020 – 2025, como parte de su compromiso con la regeneración sostenible. Este primer proyecto de restauración ecológica realizado en Chile permitirá en el mediano plazo evitar la emisión de cerca de 1.000 toneladas de CO2.